viernes, 30 de noviembre de 2012

La funda de móvil


El otro día, estaba en un cajero automático intentando hacer magia para que saliese algún billete de la máquina, mientras al mismo tiempo coqueteaba por what's up, mientras al mismo tiempo mi hijo pequeño se balanceaba encima de la barandilla de la rampa para personas con silla de ruedas que deben entrar en el banco (como si no tuviesen ya suficiente desgracia). Anyway, estaba pues "multitasking", como siempre, cuando mi hijo perdió el equilibrio. Pegué un grito, lancé el móvil por los aires (fue a parar al otro lado de la acera, bajo la mirada atónita de los transeúntes) y me abalancé sobre el niño que, naturalmente, estaba bien. El móvil no. No tenía ni un rasguño, pero se había quedado sordo y mudo. El what's up sí funcionaba, así que aproveché para mandar a la porra a mi ligue (no solo mi hijo casi se descalabra por su culpa, sino que encima me había quedado sin iphone) y me fui a la tienda de apple. Allí, puse cara de angelito y conté que, de repente, sin que hubiese ocurrido nada de nada de nada, el móvil se había estropeado, que era lo más raro que me había ocurrido en la vida. Me miraron con cara de sospecha. Entonces puse cara de angelito + ojos muy abiertos + cara de infinita tristeza y, al final, me dieron uno nuevo (pagando un módico precio). He comprado esta funda ultra resistente de bull dog (de Marc Jacobs) y me he dado de baja de what's up. Es demasiado peligroso.

jueves, 29 de noviembre de 2012

Las botas de estas Navidades


Foto tomada por una turista de Arizona, el 14 de noviembre en Times Square, Nueva York. La mujer estaba a punto de acercarse al mendigo, cuando un policia de 25 años, Laurence Deprimo, al ver a aquel hombre descalzo, fue a comprarle una botas y unos calcetines, se arrodilló a su lado y se las puso. Al regresar a Arizona, la mujer mandó la foto al departamento de policía de Nueva York. La han colgado en su página de facebook. Ya la han visto 1,6 millones de personas.
Yo creo que las únicas botas que deberíamos intentar calzarnos estas Navidades -y tal vez también el resto del año- son las del policía. ¿No?

miércoles, 28 de noviembre de 2012

Sabores y olores





Pequeñas cosas que he ido descubriendo a lo largo de los años y que me hacen feliz (soy una chica fácil, yes).

- El bálsamo labial Carmex. Es el mejor del mundo, refresca los labios, los deja mentolados y súper hidratados. Lo venden en algunas perfumerías, pero yo lo compro en Amazon en cajas de 12, es mucho más barato (aunque es muy barato de todos modos), y así se lo puedo regalar a todas mis amigas.

- "Après l'Ondée". Mi perfume favorito. Ya he hablado de él. Un perfume de 1906, empolvado, muy sutil (no se huele si no te acercas mucho), melancólico y radiante a la vez, mimosa, almendras, salvia, tomillo, romero. No se vende en España, pero sí en la página web francesa de Sephora. Según Luca Turin, uno de los 20 mejores perfumes de todos los tiempos.

- Ambientador "Nazareth" de Cire Trudon. Huele a navidad, pero en mejor. Hace que los niños sueñen con los angelitos. Me pone contenta recorrer la casa haciendo "plish, plish". Es carísimo, pero no se acaba nunca y la botella es muy bonita. No recuerdo donde lo compré.

- Pasta de dientes Euthymol. La mejor del mundo, la más barata, la más fuerte. Peligrosamente adictiva. La compro de 10 en 10 en britsuperstore.com. Y también se la regalo a todos mis amigos.

Feliz miércoles, queridos.

sábado, 24 de noviembre de 2012

Cosas que vale la pena recordar ahora que se acerca la navidad.


Para mí, las navidades son algo parecido a un huracán: hay que estar preparado, hay que protegerse y hay que disfrutar del espectáculo. Algunas reglas básicas:

1. No hay ninguna razón para reunirse con gente a la que no ves durante todo el año. Si no los ves durante todo el año es por algo (normalmente porque te importan un pito). La Navidad no tiene porque ser una excepción.

2. Haz acopio de víveres: vino blanco, vino tinto, champán, cerveza, ginebra, tónica, hielo, etc. Cosas de primera necesidad.

3. No compres plantas de Navidad con hojas rojas: son feas, son antinaturales (¿qué es eso de una planta con hojas rojas?) y es el típico regalo que dice: "No tengo ninguna imaginación, o no tengo ningunas ganas de utilizarla contigo, o soy un rácano". Son casi un insulto.

4. Ahórrate todos los "Feliz Navidad" (según cómo, también son un insulto). Como muy bien saben los niños, lo único bueno de la Navidad son los Reyes Magos porque traen regalos y son mágicos.

5. Céntrate en hacer de rey mago de verdad (si no tienes pasta para regalos, al menos intenta ser todo lo mágico posible). Con tus hijos, con tu gente, con tus amigos (en Navidad, amigo es aquel al que puedes llamar llorando a las 4 de la madrugada para contarle que te sientes fatal porque has vomitado encima de tu suegra, te has comido una caja de polvorones entera y has intentado besar a tu sobrino de 16 años).

6. Arréglate. La dejadez es inaceptable en las situaciones críticas. Imagina que eres el capitán del Titanic y actúa como tal.

7. Y recuerda el famoso dicho (mágico), que sirve para todas las ocasiones imaginables: "Y también esto pasará".

Bueno, ahora me voy al Caprabo para empezar con el punto 2.

Feliz sábado, queridos.

La foto: un libro para colorear de Ryan Gosling. Lo voy a poner ahora mismo en mi carta a los reyes.






jueves, 22 de noviembre de 2012

Marilyn y Chanel nº5


Frase mítica de Marilyn. Un reportero le pregunta qué usa para dormir. Y ella responde: "Solo unas gotas de Chanel nº5". Y lanza el perfume a la posteridad. Y, tal vez, lanza también la moda de dormir desnuda y de perfumarse antes de meterse en la cama. Dos de esas cosas súper lógicas, una vez alguien las ha dicho. No hay nada como la desnudez cuando es acogida -recogida- por un plumón, por el mar, por otro cuerpo. Marilyn lo sabía, of course. Y también sabía que un perfume es un vestido. (Que tía tan lista). Y que no hay nada como una gotas de tu perfume (que pasarán a la almohada, que pasarán a los sueños) antes de meterse, desnuda, en la cama. Pues bueno, en este pequeño clip, Marilyn cuenta la verdad sobre aquella frase mítica.

Feliz jueves, queridos.

lunes, 19 de noviembre de 2012

Los zapatos de Oscar Wilde


Tal vez no sean el tipo de zapatos que vayan a hacer que los hombres te persigan por la calle o se caigan al suelo al verte. Pero, como dice mi amiga Clara (la más guapa de Barcelona): "Cuando no triunfo, es que voy bien". Después de las bailarinas (que pueden ser Repetto o Porselli), después de los zapatos masculinos de cordones (que deberían ser Church's) y de las desert boots (Clarks), después de las deportivas (Converse o Adidas o Nike), y después de la deportivas con plataforma (que solo pueden ser Isabel Marant, y que, de todos modos, ya no se pueden llevar porque las lleva absolutamente todo el mundo, yo volveré a sacar las mías dentro de 8 años), apetece bastante ponerse este tipo de zapato medio victoriano, medio zapatillas de estar por casa, medio mocasín, que ahora se hacen llamar "slippers". Con vaqueros caídos, pelo despeinado, camisa un poco abierta y pinta de acabar de salir de la cama (acompañada). Mientras más chic o pijo sea lo de abajo, más rock & roll debe ser lo de arriba, ¿eh? Es una regla básica que no hay que olvidar nunca. Bueno, me voy a despeinar un poco, que hoy me he puesto las perlas de mi madre.
Feliz lunes, queridos.

sábado, 17 de noviembre de 2012

Cuestionario Mileniano: Jorge de Cominges


Abogado, novelista, cinéfilo empedernido, director durante doce años de "Qué leer" (la única revista literaria que ha habido en este país, que no solo leían editores y gente del mundillo literario, sino también lectores "normales"). Hombre enjuto, con un aspecto particularísimo, una elegancia propia y discreta, y una amabilidad y buena educación (mezcla de buenas maneras y de auténtica sensibilidad por lo que ocurre alrededor de uno mismo), que hoy en día parecen en vías de extinción. Cuando yo frecuentaba el mundo editorial, sabía que si me lo encontraba en algún sitio, siempre me saludaría, siempre tendría conmigo una palabra amable y siempre me contaría algo gracioso (y no malévolo). Así que el otro día, cuando me lo encontré en el Premio Herralde, no pude evitar pedirle que me hiciese un cuestionario.

1. ¿Cuál es tu primer recuerdo de moda?
Los sombreros (estrafalarios) de Balenciaga de mi madre.

2. Tus 3 prendas de ropa favoritas.
Las corbatas, los calcetines, las bufandas.

3. ¿Te consideras presumido?
Sí.

4. ¿Qué es el estilo?
Algo inaprensible, que te hace diferente. No es lo mismo que la elegancia. Una persona joven puede tener estilo pero raramente será elegante.

5. ¿Qué es -o era- el lujo?
Antes era el refinamiento en ropa, complementos o muebles. Ahora pasa por lujo cualquier horterada brillante o estrafalaria. Hoy en día el verdadero lujo es lo artesanal.

6. ¿Crees que hace falta tener mucho dinero para vestir bien?
Mucho, no. Solo el suficiente.

7. ¿Qué es un hombre elegante? ¿Y una mujer?
Tanto uno como otra, el que no llama la atención, pero queda en la memoria, no tanto por la ropa que luce, sino por su forma de llevarla.

8. Tus tres ídolos estilísticos masculinos. Y femeninos.
José Luis de Vilallonga, Cecil Beaton, Rex Harrison. Audrey Hepburn, Marisa Berenson, Tilda Swinton.

9. ¿Crees que hay un estilo barcelonés?
Sí. Las mujeres llevan demasiadas joyas, los hombres van desarrapados.

10. Los 3 hombres mejor vestidos de Barcelona. Y las 3 mujeres.
Federico Correa, Rafael Argullol, Carlos Martorell. María del Mar Arnús, Marta Ventós, Pilar Díaz de Quijano.

11. ¿Crees que los intelectuales, escritores, editores, etc, tienen un estilo particular?
En Barcelona, digamos que pretenden ir casual y tan solo resultan -salvo contadas excepciones- cutres.

12. ¿Crees que glamour, literatura y talento volverán a rimar algún día en Barcelona, como ocurrió durante la Gauche Divine?
Ojalá.

13. Los 3 escritores más elegantes de la historia. Y las 3 escritoras.
Samuel Beckett, Aldous Huxley, Henry-Pierre Roché. Isak Dinesen, Edith Sitwell, Herta Müller.

14. Tus 3 diseñadores favoritos. ¿Por qué?
Balenciaga, Chanel, Saint Laurent. Eran creadores y originales.

15. Una prenda que siempre resulte elegante en un hombre. ¿Y en una mujer?
Una bufanda. Una chaqueta sastre.

16. Una prensa que siempre resulte espantosa en un hombre. ¿Y en una mujer?
Zapato de rejilla con tacón cubano. Los leggins brillantosos.

17. Tres faltas de buen gusto imperdonables.
En la mesa: Utilizar cubiertos para tomar espárragos; cortar los huevos y las croquetas con cuchillo; decir "que aproveche". En el vestir: los calcetines cortos en los hombres; la caspa sobre los hombros; quitarse la americana, en la mesa, llevando corbata.

18. Tres libros sobre el estilo, la belleza.
El espejo de la moda de Cecil Beaton; A la recherche du temps perdu de Marcel Proust;  La casa de la vida de Mario Praz.

19. Tres películas sobre lo mismo.
Il Gattopardo de Luchino Visconti; Gigi de Vincente Minnelli; Shanghai Express de Josef von Sternberg.

20. La prenda de vestir que te gustaría que te regalasen.
Cualquier cosa de cashmere.

La imagen: una empuñadura de espada que representa un caballo persa, que Jorge tiene en su biblioteca.

viernes, 16 de noviembre de 2012

WONDER WOMAN

Muñequera genial de "By BVL". Porque no creo que haya otra manera de definir a las mujeres que tienen hijos, trabajan (o buscan trabajo), se ocupan de su casa, de su familia y de sus amigos, que intentan que a su alrededor todo funcione y que, aun así, encuentran tiempo para salir de casa con el rímel puesto, con los tacones puestos, y, sobre todo, con la sonrisa y el sentido del humor puestos.
Se la voy a regalar a todas mis amigas.
Feliz fin de semana, queridos míos.

martes, 13 de noviembre de 2012

El potencial erótico de los marcos de las puertas



Es la primera vez que tomo conciencia del enorme potencial erótico de: marco de puerta + puro + piernas levantadas. No entiendo cómo no había caído antes. No parece lo más cómodo del mundo, no. Ni lo más práctico. Pero si Paul y Kate opinan que sí, es que sí. Me voy a practicar. De momento, la versión vestida. 

Feliz martes, queridos.

lunes, 12 de noviembre de 2012

Llorar como un hombre



Llorar como un hombre. Que es la única manera de llorar. El jueves, el presidente de Estados Unidos habló a los jóvenes voluntarios de su campaña en Chicago. Para darles las gracias, y para contarles lo que significaba para él ver a aquellos chicos, más inteligentes, más valientes, más estructurados de lo que era él a su edad. Dice la palabra "orgulloso". Dos veces. Y llora. En mangas de camisa blanca remangadas. Si todavía no lo habéis visto, no os lo perdáis. Dudo mucho que el día 25 veamos nada parecido.

sábado, 10 de noviembre de 2012

SALIR POR LA NOCHE


Algunas normas básicas para las salidas nocturnas.

- No salir NUNCA con alguien que te advierte (te amenaza) de que no bebe, ni fuma. A no ser que  se trate de alguien muy muy muy brillante (como mi madre, por ejemplo), alguien que sale, y no bebe ni fuma, resulta insoportable un poco tedioso. La típica persona loca que a las 2 de la mañana te empieza a contar sus problemas ginecológicos, en vez de hablar de metafísica, de amor, de temas nocturnos (hay temas nocturnos y temas diurnos, un día hablaremos sobre eso, ¿eh?), o de ponerse a recitar poemas.

- No salir NUNCA con alguien que no come. Sí, chicos, hay un nuevo tipo de mujer que no come. Se sienta delante de ti con dos hojas de lechuga, mientras tú devoras el pan, la mantequilla, la burrata y el postre, y el cóctel y el vino blanco, sintiéndote como si estuvieses cometiendo un crimen. Al final, te sientes tan culpable (y tan gorda), que, haciendo un esfuerzo sobrehumano, dejas la mitad de la mousse de chocolate...

- No salir NUNCA a ligar por la noche. (Salir a ligar durante el día, está bien). A partir de los 30, salir a ligar por la noche resulta patético un poquitín triste. Cómo reconocerlos (a los ligones/ligonas de noche): Ellas: tacones altos, pelo ultra liso, maquillaje, falda o pantalón súper ceñidos (que te preguntas cómo han logrado enfundarse). ¡Ah! y no hablan NUNCA con las otras mujeres (incluso si tú, pobre ilusa, les hablas, ellas no te contestan. Sí, me ha pasado). Ellos: demasiada colonia, mirada de chincheta, pelo repeinado, agarrados con inusitada fuerza a su copa. Y cuando te alejas de ellos, al cabo de 10 minutos, como por arte de magia, aparecen a tu lado, con los ojos escrutadores y las preguntas tontas. ¡Ah! y en el minuto 2, te hacen saber que están separados. (Sí, también me ha pasado).

- No vestirse NUNCA para salir. Ya sé que poner esto en un blog de moda es un crimen. Pero lo tengo comprobado. Hay que salir vestida como si fueses al Caprabo (y hay que ir al Caprabo bien vestida, ¿eh?). En cuanto haces un esfuerzo, ya no te lo pasas tan bien.

- No salir NUNCA con gente que no te guste mucho. Hay que salir solo con amigos de verdad. Los que con solo una mirada saben lo que estás pensando, los que saben lo que te hace reír. Los que se ríen con tus tonterías. La gente que te da mal rollo por la mañana, por la noche es peor.

Ahora debo volver a mi vida diurna.
Feliz sábado, queridos.

PS: La foto: los anillos más geniales del mundo. Pues eso: Rock my life, baby.

miércoles, 7 de noviembre de 2012

Anagrama party


Tengo la teoría de que, muchas veces, cuando uno deja de intentar algo, es cuando lo consigue: cuando dejas de intentar que te quieran a toda costa, es cuando te empiezan a querer. Cuando dejas de intentar enamorarte, es cuando te enamoras. Y cuando dejas de intentar hacer la fiesta más guay, es cuando te sale la fiesta más guay. El lunes por la noche, la fiesta del Premio Herralde fue la fiesta más guay. Porque Jorge Herralde sigue cabalgando (no pares, no pares). Porque el vino blanco estaba helado. Porque no parecía que nadie hubiese acudido por compromiso, para figurar o para hacer negocios. Porque había un par de personas muy guapas y un par de personas muy elegantes y un par de personas muy inteligentes y un par de personas muy simpáticas y un par de personas muy brillantes y un par de personas muy amables y un par de personas muy freakies y un par de personas muy divertidas y un par de escritores muy buenos y dos de mis mejores amigas. Y eso hace un total de mucha gente guay. Y porque se celebraba una de las cosas más guays del mundo: la buena literatura. Una cuestión de estilo, como casi todo.

Feliz miércoles, queridos.

En la foto en gran gran gran Freddie Mercury y la gran gran gran Annie Lennox.


domingo, 4 de noviembre de 2012

Los 4 magníficos de Prada


Hay tantas razones por las que me gusta esta foto que no sé por donde empezar:

- Las manos de los 4.
- La falta de simpatía de los 4.
- Los 4 cuentan historias.
- Parecen medio enfadados, medio preocupados. Guardan sin duda un terrible secreto un poco trágico. Y solo lo guardan para protegernos a nosotras.
- Las miradas de los 4: doloridas, orgullosas, dignas (ojalá la dignidad se vuelva a poner de moda), antiguas.
- Parecen hombres de los de antes, de los que no estaban para muchas tonterías (cuando muchos hombres de hoy en día parece que estén solo para tonterías).
- El gesto: los codos doblados. Un hombre con los codos levemente doblados: hay que casarse con él.

El 1 (Garrett Hedlund): Está a punto de reñirnos (pero nos perdonará, seguro).
El 2 (Willem Dafoe): Está furioso, nos odia (nos ama) con toda su alma, le hemos hecho mucho daño. Pero sus manos de simio nos perdonarán. Un hombre con manos de simio: hay que casarse con él.
El 3 (Jamie Bell): Nos desprecia. Está muy disgustado. Hemos hecho algo gravísimo, tipo pisotear el parterre de peonias de la mansión en un ataque de furia. Pero nos acercaremos y le susurraremos algo en la oreja, y cogeremos la rosa que lleva en el bolsillo y se la pondremos detrás de la oreja y le bajaremos el cuello del cuello cisne que lleva para que pueda respirar, y nosotras también.
El 4 (Gary Olman): Es el que más enfadado está. No está tan locamente enamorado de nosotras para no ver cómo somos y su juicio es implacable. El amor y el sexo ya no son su principal preocupación (en los otros 3 tíos, sí), creo. Le hemos arruinado, o estamos a punto de hacerlo. Y lo sabe.

Bueno, tengo que volver al mundo real.
Feliz domingo, queridos.

jueves, 1 de noviembre de 2012

El último regalo


Ayer me vino a ver un señor con un regalo. Mi madre le encargó, hace muchos meses, una mantelería bordada para mí. Me la quería regalar para Navidad. Tiene casi todos los elementos de muchas de las cosas que intentó transmitirme (con más o menos éxito): la alegría, la delicadeza, la sutileza, la infancia, la belleza, la falta de pretensiones, el rigor, la ligereza, la calidez. Cosas que intento que estén presentes (con más o menos éxito) también en este blog. La he guardado en el estante más alto del armario. Pero ya sé con qué mantelería cenaremos estas Navidades.